La digitalización del sector farma-salud

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El desarrollo y la distribución de productos farmacéuticos son dos de las principales áreas en las que se obtienen mejoras sustanciales a través de la transformación digital del sector sanitario asistencial y farmacéutico, conocido como farma-salud. Tecnologías como big data, las aplicaciones de Inteligencia Artificial y blockchain son clave para estos avances.

En este sector, los datos abundan y, si se utilizan bien, pueden aportar grandes ventajas competitivas, como la mejora de la rentabilidad y la eficiencia de los procesos. Sin embargo, al ser uno de los sectores más regulados que existen, la aplicación de ciertas tecnologías o procesos tiene sus barreras. Salvarlas marcará la diferencia entre las empresas.

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Principales tendencias que contribuyen a la digitalización del sector farma-salud

Existen muchos factores que no son solo tecnológicos que favorecen la transformación digital en este sector. 

Hoy, las personas estamos más comprometidas e implicadas en nuestra propia salud; tenemos acceso a más información sobre las distintas enfermedades y opciones de tratamiento y, por ello, podemos reconocer en cierta medida algunos síntomas evidentes o participar en las conversaciones sobre tratamientos y medicamentos. Esto, es verdad, no es una ventaja si la información se malinterpreta, pero al menos es un signo de que la predisposición por cuidar de la salud es mayor hoy que hace treinta años. 

Esa disponibilidad de información también puede jugar un papel importante, siempre que se consulten las fuentes adecuadas, en los datos disponibles acerca del rendimiento y los efectos secundarios de los productos farmacéuticos. Una búsqueda simple sobre un medicamento concreto ofrece resultados sobre cómo ha funcionado en los pacientes, efectos secundarios, etc. De nuevo, esto tiene que ser tratado con rigor para no caer en fuentes de desinformación.

Una tendencia mucho más clara es la que relaciona la mayor transparencia y accesibilidad actual con el aumento de la competencia en el sector. La segunda opinión médica o farmacéutica está más cerca que nunca para el usuario, que puede elegir a quién preguntar y, además, con la opción de la telemedicina o la teleconsulta. Así, la atención primaria se abre a una mayor competencia en algunas especialidades y los pacientes tienen más opciones que nunca. 

Además, es fácil investigar sobre los médicos de la zona para tratar de encontrar uno que se ajuste a las necesidades particulares del paciente. Esto, como podemos suponer con acierto, implica el fomento de la innovación y una contención de los costes en el sector sanitario en general (al menos, para mantener la competitividad). Todas estas ventajas pueden trasladarse también a la industria farmacéutica: los pacientes tienen más opciones para elegir un medicamento y hay más motivos para la innovación que diferencian a unas empresas de otras.

Por último, en cuanto a tendencias, los pacientes quieren respuestas de inmediato (igual que cualquier consumidor en cualquier otro sector), y eso ahora es posible gracias a la tecnología. La telemedicina o las consultas digitalizadas han facilitado este punto, así como han agilizado la realización de pruebas y la obtención de los resultados mucho más rápido.

Tendencias y oportunidades de la digitalización farmacéutica

Hasta ahora se ha tratado el sector sanitario en general y de cómo se ha visto afectado por el mundo digital, pero ¿qué ocurre con la industria farmacéutica? Los cambios digitales provocan reticencias entre los profesionales del sector, pero las tendencias en salud digital hacen que las empresas farmacéuticas tengan más posibilidades que nunca para influir positivamente en el bienestar de los pacientes e impulsar el conocimiento de su marca. Además, existen tres beneficios clave para estas empresas que deben tener muy en cuenta:

  • La Inteligencia Artificial como palanca para la mejora de la experiencia del paciente. El auge de esta tecnología hace que sea viable aplicarla para acelerar el descubrimiento e investigación de fármacos, el diagnóstico y la planificación de tratamientos, el cumplimiento de normativas y la gestión de enfermedades. Todo redunda en un beneficio tangible para el paciente. Además, se puede aplicar también en la atención al paciente, en formación y en márketing para ofrecer experiencias personalizadas. Con la pandemia todavía en nuestra memoria, la IA es fundamental para crear modelos capaces de predecir brotes de enfermedades.
  • En segundo lugar, la transformación de la cadena de suministro del sector es viable gracias a blockchain. La creación de un registro seguro, trazable, transparente y auditable en cada paso del ciclo de vida de los productos favorece el cumplimiento de la normativa y, además, proporciona mayores garantías de seguridad en los productos farmacéuticos.
  • Por último, pero no menos importante, los modelos de Machine Learning aplicados al desarrollo de nuevos tratamientos permiten analizar ingentes volúmenes de datos, identificar patrones y hacer predicciones basadas en esos patrones para dar con la mejor opción de tratamiento en una fracción del tiempo empleado en la actualidad.
Fernando Fuentes

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