Recomendaciones para que tus correo electrónicos no se conviertan en SPAM
Los proveedores de correo han desarrollado sofisticadas tecnologías anti-spam para impedir que el correo no deseado llegue a nuestra bandeja de entrada. Veamos unas recomendaciones para que los correos electrónicos de nuestras campañas de marketing no se conviertan en SPAM.
La crisis generada por la pandemia ha obligado a transformar el modo en el que trabajan las empresas, algo que los ciberdelincuentes han aprovechado para explotar vulnerabilidades, campañas de SPAM, phishing o ransomware.
En el caso del SPAM los métodos de detección han evolucionado y es posible que nuestras campañas de email no lleguen a buen puerto si utilizamos palabras que los sistemas interpreten como sospechosos de ser considerados correo basura o intento de phishing.
Por tanto, debemos saber que algunas palabras que se utilizan en las líneas de asunto del email llegan a generar niveles de alerta altos y provocan una interacción insuficiente que hace que la reputación del remitente sea negativa y perjudique la entrega de e-mails en envíos futuros.
Razones por las que el correo acaba en SPAM
1. No hemos obtenido el permiso del destinatario
Obtener el permiso del destinatario es uno de los principios más importantes a seguir porque siempre ayudará a mejorar la capacidad de entrega de los emails. No debemos comprar listas porque puede arruinar nuestra reputación y la recepción de nuestros correos se verá mermada.
2. Mala reputación de la IP
Podríamos estar enviando correos desde una dirección IP compartida. Si es el caso, cabe la posibilidad que la IP cuente con una mala reputación y no por nuestra propia actividad, sino porque otro usuario la haya utilizado para enviar spam. Lo ideal es tener una dirección IP dedicada.
3. No poner el enlace para darse de baja
Otra de las recomendaciones para que el correo no acabe en SPAM es la de disponer de un enlace de cancelación de la suscripción a la lista de correo. El hecho de que sea fácilmente visible y accesible en la parte inferior del email tendrá un gran impacto en su capacidad de entrega.
4. Mal diseño del correo electrónico
Consejos útiles para el diseño del correo que se enviará a los destinatarios:
- Que sea compatible tanto en dispositivos móviles como de escritorio
- Que disponga de una marca reconocible (colores, fuentes, imágenes, etc.)
- Debe tener una buena proporción de texto
- Evitar palabras que desencadenan SPAM y que veremos a continuación
- Si es un correo de marketing, deberemos incluir una dirección física para cumplir con CAN-SPAM
- Texto sencillo y directo
Palabras que activan los filtros anti spam o que hacen sospechar a los usuarios
Aquí dejamos una serie de palabras y enfoques que debemos tener en cuenta a la hora de diseñar un correo electrónico si queremos evitar que nos confundan con spammers o phishers.
Factura
“Factura” es una de las palabras más utilizadas por los phishers. Debemos evitar este término en las líneas de asunto y como usuarios debemos realizar una comprobación del dominio que la envía.
Nombres de banco o tarjetas
Hacerse pasar por instituciones financieras, imitando formatos y colores, es otra de las prácticas habituales de los estafadores. Como usuario final deberemos verificar que los enlaces sean los correctos, que la redacción del email sea buena y que la estética general del correo no haga aguas por ningún sitio.
Para nuestra estrategia de marketing utilizaremos herramientas de autentificación DKIM y SPF para impedir que los suplantadores de identidad no dañen nuestra reputación.
Hemos ganado un premio
Mensajes del tipo “querido amigo”, “has sido elegido” o “has ganado un premio” (de un concurso del que no hemos participado) es otra de las prácticas comunes en la que no debemos caer. Los filtros que disponen los proveedores de correo suelen bloquearlos, pero si como emisores de ese correo queremos anunciar un concurso, debemos ser cautelosos al utilizar ciertas palabras y, tal vez, una buena idea sería anunciar este tipo de cosas por nuestras RRSS
Email Urgente o pidiendo ayuda
Emails que nos piden ayuda y que nos “premian” por ello, o los que urgen realizar una acción para que no nos bloqueen algo, son típicos en prácticas de phishing. No deberemos utilizarlos como remitentes, ni abrirlos como usuarios.
Juegos gratis o bonos
Como remitente deberemos tener cuidado para no ser comparado con este tipo de spammers que ofrecen “juegos gratis” o suculentos “bonos de bienvenida”. Como usuarios debemos evitar interactuar con emails que prometen ganancias garantizadas o beneficios poco reales.
Conclusión
Estas recomendaciones son un excelente punto de partida para que el correo enviado no acabe en SPAM, pero hay alguna cosa más que considerar. Afortunadamente, un proveedor de servicios de correo electrónico de buena reputación podrá ayudarnos a que nuestros correos lleguen correctamente. Desde la autenticación y la gestión de la IP hasta el seguimiento de métricas.