Rust: cómo crear un servidor de juego
Rust es uno de los juegos más populares y más extensamente jugados de la actualidad. Sus constantes actualizaciones desde su lanzamiento en 2018, los frecuentes streams en plataformas como Twitch o los eventos masivos como los Rust Squid games o Egoland siguen colocando a Rust en la cima de la popularidad.
Puedes jugar a Rust sólo o en equipo, ya sea enfocándote en luchar contra el mundo y los elementos (PvE) o contra otros jugadores (PvP). Jugar en equipo siempre es más divertido y seguro, y puedes llegar a construir bases más imponentes y bien dotadas, con todos los entresijos necesarios para proteger tu preciado loot.
Por todo esto, disponer de un servidor de Rust propio es la mejor manera de disfrutar de este juego porque te permite definir con exactitud todos los parámetros que definirán las partidas. Desde las características del mundo hasta la cantidad de recursos que consigas en cada iteración, el máximo número de jugadores o la extensión del mapa, todo puede estar bajo tu control.
La decisión: ¿uso mi propio servidor doméstico o alquilo uno?
Crear tu propio servidor doméstico es una de las opciones para controlar todos los aspectos del mundo de Rust. Tanto el servidor como el juego pueden convivir sin problema en la misma máquina, así que con un equipo de (muy) alta gama podrías crear y alojar un servidor dedicado.
Como sucede en otros juegos, optar por esta vía implica que el rendimiento se va a resentir a medida que se incluyan jugadores, cuanto mayor sea el mapa y más mods instalemos.
La opción de alquilar un servidor es la más flexible y recomendable para crear tu servidor Rust. En Arsys te ofrecemos distintas posibilidades configurables que, dependiendo de las necesidades de tu nuevo mundo por crear, te vendrán de perlas. Veamos cuáles son esos requisitos técnicos de este videojuego.
Requisitos del sistema para crear tu servidor de Rust dedicado
Los requisitos de los servidores de Rust en relación con la CPU, RAM y espacio en disco dependen de los factores que ya comentamos (tamaño del mapa, número de jugadores, etc.) y, muy importante, de los mods instalados.
Para los servidores privados más pequeños vas a necesitar un procesador con al menos 3,4 GHz. Para un mundo con espacio para varios cientos de jugadores, se requieren 4 GHz. Hay un factor importante que tener en cuenta y es que el software de servidor dedicado de Rust está diseñado como una aplicación de un solo núcleo.
Por eso, lo recomendable es que el sistema anfitrión de alto rendimiento disponga de un solo núcleo para un rendimiento óptimo, ya que distribuirlo a través de varios núcleos reduce inevitablemente el rendimiento.
A la hora de pensar qué tamaño de RAM se necesita, hay que tener una idea previa básica del tamaño del servidor Rust que quieres montar. Si estás planificando un tamaño de mapa estándar de tres kilómetros cuadrados para un grupo pequeño de jugadores (de cinco a diez) y sin usar muchos mods, la recomendación mínima de 4 a 6 GB de RAM será suficiente para tu servidor dedicado. Si optas por alojar a cientos de jugadores a la vez dedica como mínimo de 8 a 16 GB de RAM.
Sobre el espacio en disco duro necesario, se necesitan unos 6 GB de espacio en disco para la instalación básica de un servidor dedicado a Rust. Sin embargo, se debe planificar espacio de almacenamiento adicional para los archivos de usuario y cualquier modificación adicional. Para el alojamiento de un servidor Rust a largo plazo, se recomienda una cuota mínima de almacenamiento de 32 GB.
En cuanto al sistema operativo, puedes elegir entre aplicaciones de Microsoft (Windows Server 2019, Windows Server 2016) y Linux (Ubuntu, Debian, CentOS, OpenSUSE). El software de servidor «SteamCMD” también está disponible para macOS, aunque a veces da problemas.
La creación paso a paso del servidor
Ahora que ya lo tienes todo, es hora de crear tu servidor Rust. El primer paso es acceder al panel de control con tus credenciales y seleccionar tu nuevo servidor de Arsys (elige la mejor opción de Servidor Cloud para que se ajuste a tus necesidades y a las prestaciones que desees para tu servidor multijugador).
Instalación de SteamCMD
Una vez seleccionado tu servidor, accede al escritorio remoto para comenzar la instalación del software necesario. Se te solicitará tu contraseña de administrador del servidor para proceder. Una vez dentro del escritorio remoto, el siguiente paso es instalar el software SteamCMD. Se trata de una versión de línea de comandos del cliente de Steam que te permitirá instalar el software de servidor dedicado de Rust.
Una vez instalado este software, debería ejecutarse como una ventana de consola típica, sólo que con el prompt «Steam>».
Instalación del servidor de Rust
Descarga e instala el software del servidor de Rust a través de la línea de comandos de Steam. Para ello, primero especifica el directorio de instalación con el siguiente comando:
force_install_dir C:\rust-server\
Puedes elegir otro nombre de directorio.
El siguiente paso es iniciar sesión como usuario anónimo en los servidores públicos de Steam (Steam Public) mediante el comando:
login anonymous
Descarga la última versión del software del servidor Rust utilizando Steam App ID 258550 mediante el siguiente comando:
app_update 258550 validate
Una vez completada la instalación, cierra la sesión del servidor Steam escribiendo «quit».
Abre los puertos
Es necesario abrir el puerto UDP 28015, aunque si se desea ejecutar comandos de administrador a través de la línea de comandos es recomendable abrir el puerto TCP 28016 para enviar comandos vía RCON directamente desde la línea de comandos o la consola del juego (con el rol de administrador).
Como es habitual, accedemos a nuestro panel Cloud y, en la categoría Servidores y Cloud, dentro de Red, seleccionamos Políticas de Firewall y ahí añadimos las nuevas entradas con estos puertos, terminando así con el proceso.
Iniciar el servidor y comenzar a jugar
Con los puertos habilitados, la configuración está completa, y por fin puedes iniciar tu propio servidor Rust.
Desarrollador web, crea y mantiene los sitios web de Arsys. También idea herramientas internas que facilitan y mejoran los procesos. Es experto en desarrollo FrontEnd y en la optimización del rendimiento web, áreas en las que constantemente busca innovar para ofrecer la mejor experiencia online.