Metacloud: qué es y hacia dónde nos lleva este nuevo concepto
Desde que Internet existe, siempre se ha ido evolucionado hacia niveles más altos de abstracción. Pasamos de la red local de sus orígenes a una red de redes; de ahí al paradigma del cloud, multicloud y, ahora, se avanza un paso más hacia el concepto metacloud.
Podemos decir que el metacloud es una evolución del concepto de multicloud o, más bien, que multicloud está transformándose en el futuro metacloud. Explicamos esto. Estamos asistiendo a la aparición de una capa tecnológica que se sitúa por encima de multicloud. Sería el equivalente a añadir una nueva capa al modelo OSI, pero aplicado a este entorno cloud.
Multicloud se puede ver como la plataforma que combina servicios cloud de distintos proveedores y que ofrece flexibilidad, más seguridad, y un mejor tratamiento de datos. Estas ventajas las obtenemos a costa de las dificultades inherentes de gestión que nos vamos a encontrar cuando hemos de tratar con diferentes proveedores.
Para paliar esta situación, se ha ido generando una capa de desarrollo de aplicaciones, operaciones, observabilidad, seguridad, gobernanza y demás que se sitúa por encima de los proveedores de cloud públicos y que dan lugar, por así decirlo, al metacloud.
Lo cierto es que cualquier nombre, sello o palabra de moda es más que debatible en el mundo del cloud. Si añadimos el prefijo meta tenemos aún más espacio para debatir aunque, en el fondo, a lo que se refiere este término es a que estamos ante una colección de nubes y, a veces, de sistemas edge que trabajan juntos para un propósito mayor.
El metacloud como facilitador de la gestión del cloud
Puede ser confuso, a priori, hablar del cloud, el multicloud y el metacloud. En realidad, este último concepto no se refiere a una tecnología o topología, sino a una capa de servicio entre diferentes nubes. Su razón de ser: que no sea necesario definir tecnologías específicas para cada nube pública dentro de nuestro multicloud.
De esta manera, se resuelven algunos problemas conocidos y se reduce la complejidad. Dejaremos de hacer tareas o procesos redundantes, por así decirlo. Se utilizarán capas de abstracción y automatización comunes para operaciones, gobernanza y seguridad con un único punto de control y API. En definitiva, se hará todo mucho más sencillo en la gestión.
Desde ese metacloud no tendremos que lidiar con servicios de infraestructura como el almacenamiento y la computación, pues ya se encargarán de ello los proveedores cloud. Todo debería ser, por tanto, más fácil y menos complejo, con menos coste y riesgo de las operaciones. Como anotación, para evitar confusiones, existe también este mismo término metacloud refiriéndose a la idea de conectar a particulares y organizaciones para alquilar sus recursos inactivos como el almacenamiento, CPUs, GPUs, etcétera.
¿Qué hay en el metacloud?
Una vez establecido qué es metacloud y qué sentido tiene que exista esta capa de aplicaciones superior, llega el momento de ver qué contiene esta capa. Veamos, entre otros:
- Servicios de operaciones comunes que operan para cada proveedor cloud, gestionados desde un panel de control y una interfaz comunes.
- Operaciones generales, como la gestión del almacenamiento y la computación.
- Tipos específicos de operaciones, como seguridad (secops), inteligencia artificial, base de datos…
- Capas de integración de datos. Estas se encargan de mover los datos entre los sistemas de almacenamiento y las aplicaciones dentro de una nube específica (no olvidemos que hablamos de multicloud).
- Sistemas de orquestación entre nubes, incluida la orquestación y gestión de contenedores, etc.
- Servicios de bases de datos comunes.
- Servicios de desarrollo.
- Servicios comunes de IA que proporcionan un intercambio de conocimientos entre nubes…
Estos no son más que unos cuantos ejemplos basados en las necesidades que pone de manifiesto multicloud en cuanto a gestión y aplicaciones. Es imposible definir un conjunto de aplicaciones y servicios común o universal; al revés, como sucede en cualquier implementación de tecnologías cloud, las necesidades de cada despliegue y de cada proyecto o empresa marcarán, definitivamente, qué incluye este metacloud.
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